lunes, 8 de septiembre de 2008

El nacimiento de arcilla (I)


Hace unos días... un amigo Dominante me preguntaba por mi frase... "darme la vuelta... como a un calcetín"... y aunque se la expliqué... realmente... no tiene mucho sentido... si no se conoce... quién es María... y como nace arcilla.




Mi nombre... como el de muchas mujeres de esta España nuestra... es un nombre compuesto... que empieza con... María.




En mi vida cotidiana... me llaman por mi segundo nombre.




No me gusta mentir... y siempre quise dejar separada... esa vida cotidiana... del BDSM... por ello... empecé a usar mi primer nombre.




También es cierto... que nunca pensé... conscientemente... en convertirme en sumisa.




Yo... tan solo quería... divertirme un rato...




En ocasiones... cuando estaba muy aburrida... buscaba relatos eróticos en la red... y me aburría con la mayoría de ellos... hasta que un día... a punto de cerrar el pc... leí un relato de dominanción... que me excitó... y fui buscando más.




Poco a poco... eran los únicos relatos que buscaba... sobre todo... los de dominación mental.




Algunos relatos... los cerraba al leer la tercera línea... demasiado fuertes para mí... con unas aberraciones... que lejos de excitarme... me hacían pensar que... la gente estaba muy mal de la azotea.




Pero en otros... leía frases como... "soy tu Dueño"... "harás lo que yo quiera"... "te usaré cuando y como me plazca"... "solo estás para mi placer"... etc... y me ponía como una moto... a tropecientas mil revoluciones por segundo.




En mis masturbaciones tras leer esos relatos... empecé a experimentar... controlando mi orgasmo... deteniéndome justo antes de llegar... para volver a ponerme al límite... y eso me provocaba orgasmos tremendos... que me dejaba temblando durante minutos.




También jugué un poco con el dolor... y me dí cuenta... que no tenía mucha resistencia... y que la excitación... asociada al dolor... solo era posible... en cuotas muy bajas.




Usaba fundamentalmente mis manos... ocasionalmente un vibrador.




Me gustaba atarme las manos... dificultarme la masturbación... dejarme el vibrador dentro de mi coño... mientras con la manos debajo de la almohada... imaginaba que me follaban contra mi voluntad... o simplemente... apoyaba el vibrador en mi clítoris... mientras que "alguien" sin rostro... me decía que... no podría correme hasta que El lo deseara.




En un "arranque" de valor... quise ver que se sentía... con las pinzas de la ropa... y ni de coña fui capaz de dejar una en un pezón... aunque... si las ponía en los pechos... alrededor del mismo... y no abusaba de la cantidad... el dolor era bajo... y la excitación alta.




Una de esas noches aburridas... dudaba entre irme a dormir... leer un relato... o buscar un chat nuevo donde echar unas risas... con gente desconocida.




No tenía mucho sueño... leer no me apetecía demasiado... así que me puse a investigar en google... y entré en varios chats... de servidores diferentes... sin que ninguno me motivara... hasta que entré en terra... con un nick de lo más anodino.




Durante varios minutos... intenté averiguar de que se charlaba... pero iba demasiado rápido para mí... así que... me dediqué a leer los nicks de los presentes.




Amotal... Amocual... Amodemasalla... fueron llamando mi atención... haciéndome sonreir... ¿y ésta gente de que va?????... me preguntaba.




Y la curiosidad mató al gato.




Me salí del chat... y volví a entrar con un nick... que llamara la atención, jijijijijijijijiji... "sumisanovata".




En menos de un minuto... se me abrieron más ventanas... de las que era capaz de atender.




"De rodillas, puta"... "entre mis amigos y yo te vamos a follar hasta que nos cansemos, zorra"... "ponme cam, perra"... "te voy a meter la polla hasta la garganta"... fueron las primeras "lindezas" que leí.




Muy mal... la gente estaba muy mal... y yo les daba "bola"... escojonada de risa.




Pero... entre esas tropecientas mil ventanas... se abrieron dos que me llamaron la atención... ambos se presentaron... y educadamente me preguntaron mi nombre... y el porqué de mi nick.




Entre otras cosas... me preguntaron que buscaba... y qué sabía del BDSM... y me intrigaron.




No hubo ninguna razón especial... para elegir a uno... en vez del otro... si acaso... que fue el primero en pedirme el messenguer... y que me cansaba que se me abrieran tantas ventanas a la vez... impidiéndome llevar una conversación... medianamente interactiva.




En aquellos tiempos... yo tenía dos cuentas... la "seria"... para cosas mas o menos oficiales, familia y amigos... y una de reserva que me había recomendado abrir un amigo... en una época... en el que el robo de cuentas estaba al día... y que no usaba nunca... excepto cuando quería hablar con él... y fue esta de reserva la que le dí.




Y así... empezamos a hablar...





CONTINUARA...

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